Los cursos virtuales llegaron para quedarse y es necesario que colegios, universidades, empresas y emprendimientos comiencen a generar estrategias que les permitan transmitir conocimientos de calidad a sus colaboradores mediante soluciones de e-learning.
La actual situación de cuarentena ha permeado en todos y cada uno de los aspectos de nuestra vida cotidiana, uno de los que más destaca es la manera en que estudiamos o nos capacitamos utilizando Cursos Virtuales; tanto colegios, universidades y empresas se vieron obligados a pasar a un medio 100% digital de la noche a la mañana, aun cuando la mayoría de ellos no tenían una estrategia digital a mediano o corto plazo en la cual apoyarse. Estos factores, sumados a una cultura de la presencialidad muy arraigada, hizo que muchos ciclos educativos fracasaran o se vieran obligados a ser postergados.
Debido a esto, las empresas dedicadas al e-learning han tomado un papel protagónico en la continuidad económica de muchos países alrededor del mundo y Colombia no ha sido la excepción, ya que pasamos de tener alrededor de 120.000 puestos de teletrabajo a más del 90% de la población consumiendo productos como cursos virutales, capacitaciones remotas, webinars, etc. Sin embargo, como todos los cambios repentinos, es importante considerar si estos productos que estamos consumiendo son de calidad o simplemente suplen la necesidad actual, convirtiéndose en obsoletos cuando todo esto acabe.
Estos, se definen como un espacio académico, un lugar de encuentro cibernético entre personas distantes que comparten necesidades e intereses referidos a un mismo campo de conocimiento, al logro una habilidad o al dominio de una técnica.
La premisa clave de la implementación de los cursos virtuales es que utilizan Tecnologías de la Información y la Comunicación (TICs) para propiciar escenarios de aprendizaje que fomenten el intercambio continuo de información entre los participantes. Ya que los Cursos virtuales son un espacio académico, tiene una intencionalidad específica y manifiesta, poseen una estructura y una forma particular de presentación adecuada para todas las personas que tendrán acceso a ellos, plantean unas dinámicas de funcionamiento y unos roles particulares asignados a los diferentes actores participantes.
Para determinar el éxito de los Cursos virtuales, es necesario evaluar la percepción de los estudiantes que reciben este curso, esto nos dará una guía de temas cualitativos que debemos mejorar; para esto, es importante estar actualizados en prácticas de User Experience (UX) y User Interface (UI) que nos permitan volver más navegable el curso y reduzca al mínimo la tasa de personas que no terminan el curso por considerarlo poco atractivo. Las encuestas dentro de los Cursos virtuales tienen la funcionalidad de guiar a los diseñadores de plataforma y de experiencia a identificar posibles errores que no se reconocieron durante la fase de programación. Por último, el componente evaluativo de los cursos virtuales facilita que el proveedor identifique si el producto final contiene información clara y pertinente; una alta tasa de notas malas significa que las personas no están apropiando totalmente los conocimientos y una tasa perfecta de aciertos significa que las respuestas son muy obvias.
Es indudable el éxito que los cursos virtuales han tenido desde sus primeras apariciones, para sintetizar las razones de su éxito hemos realizado la siguiente lista:
1. Existe un ritmo de estudio personalizado: Sabemos que no todos disponemos del mismo tiempo libre que podamos dedicar a ocio o crecimiento personal, los cursos virtuales permiten llevar un ritmo de trabajo adaptado a las necesidades de cada individuo sin necesidad de retrasar el aprendizaje de otras personas, como sucede en la presencialidad.
2. Flexibilidad en tiempo y espacio: A diferencia de un programa presencial, los cursos virtuales no tienen un límite de tiempo para llevarse a cabo, al mismo tiempo que el estudiante es libre de escoger el espacio que más le ayude a aprender.
3. Se utilizan tecnologías de la información y comunicación: Teniendo en cuenta su naturaleza revolucionaria, los cursos virtuales están constantemente buscando nuevas herramientas que les permitan complementar la parte teórica e incorpore nuevas maneras prácticas. Por ejemplo, Kahoot y Mentimeter se convirtieron rápidamente en una forma gratuita de dinamizar clases virtuales.
4. Predominan las actividades individuales y colaborativas para un aprendizaje significativo: Al desarrollarse los cursos virtuales en un ambiente digital, el aprendizaje individual se complementa con un trabajo colaborativo entre los participantes, convirtiendo el aprendizaje en algo mucho más significativo.
Como conclusión, sabemos que los cursos virtuales llegaron para quedarse y es necesario que colegios, universidades, empresas y emprendimientos comiencen a generar estrategias que les permitan transmitir conocimientos de calidad a sus colaboradores mediante soluciones de e-learning.